Con
todo mi cariño, para Machuca.
Experto gobernante de
la inquina,
cuatrero de la tinta y
la carpeta,
siniestro Rasputín de
la oficina
que baila la canción de
la peseta
como himno principal de
la rutina.
El más perverso ser de este
planeta,
sin otro pasatiempo que
su celo
por la buena labor de
la pamplina,
que ha seguido la dieta
del pomelo
y luce las corbatas de
Cañete
a juego con el tono del
pañuelo.
Antes que te descuides
te la mete,
procura andar despierto
y avisado
y no esperes jamás lo
que promete
un lobo de cordero disfrazado.
No escapas, Avilés, a tu
destino
ni aún después de
haberte jubilado;
en sueños se te aparece
el cochino,
a veces en la sopa te sorprende
si no se te tropieza en
el camino.
Perdona que un consejo te encomiende,
que el toro de la vida
no cornea
tanto como el amigo que
te vende;
y ya puestos, perdóname
que sea
cruel contigo, amigo, si
algún día
te gana Rebolledo la pelea
y encima le toca la lotería.
José Luis Tirado Fernández
Muy impactante. La primera vez que te conozco así, curioso además...pero de amigo, ése no tiene ná.
ResponderEliminarIngenioso, como simpre.
Espero, amigo José Luis, que no te lean algunos gaditanos como: Quiñones, Santander o el mismo Selu porque si no, te veo más escribiendo para ellos que atendiendo la barra de tu bar. Como siempre un placer leerte...
ResponderEliminarAbrazos.
Magnifica letra para unos carnavales
ResponderEliminar