Las penas que yo pasé,
por Santiago y Sant´ana
en Triana las dejé.
No me cobró el regaliz
el tío del quiosquillo,
al otro día volví.
La soledad, noche fría;
hechicera y calurosa
la luz de tu compañía.
Triana son Esperanza,
el Juto y el Herejía,
la Perla, el Coco y Pastora.
Sevilla es la lejanía.
Cimenta bien tu defensa,
que el que pega muchos golpes,
a muchos golpes se enfrenta.
Yo tengo por absoluto
que siendo la rama mala
no puede ser bueno el fruto.
José Luis Tirado Fernández
Soy incapaz de hacer lo que lográis los auténticos poetas del pueblo. Se me resiste hacer una sola letra de Soleá, aunque puedo escribirte la Biblia en verso. Magnífico, amigo José Luis.
ResponderEliminarY yo te digo:
ResponderEliminarTiene que ser tu saber
el que a mí me vuelve loco,
porque no encuentro el remedio,
ni mi psiquiatra, tampoco.
Bonitas soleares. Un abrazo.
Tu bajista preferido
Ser un buen poeta no es fácil; ser un buen flamenco tampoco. Cuando alguien reune ambas cosas salen estas cosas tan profundas. Un abrazo.
ResponderEliminarLetras intensas, hondas, que revelan el conocimiento de tu sentir flamenco.
ResponderEliminarSentenciosas estas letras. propias del flamenco. Escucharlas con tu voz al cante debe ser otro paso hacia lo sublime del arte. ¡Enhorabuena! Y un fuerte abrazo.
ResponderEliminarhttp://escritoenunahojaseca.blogspot.com.es/2014/08/juramento.html
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ResponderEliminarTe juro por Dios que es cierto,
siempre digo la verdad
menos las veces que miento.
ResponderEliminarParte de mis muchos males
es ser hombre de principios
que tiene malos finales.
Lo mismo ríe que llora,
ResponderEliminarmi corazón por tu culpa,
según el día y la hora.
Maravillosa página, gran descubrimiento
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