Es el título de una puesta en escena de José Luis Ortiz Nuevo y que cerró la Bienal
de 2004. Tuve el gusto de estar presente con mi padre y Paco Menudo, el que,
junto conmigo, aparece en esta foto de 1976, en el que estamos colaborando con
una de tantas causas que en aquellas fechas se prodigaban. El sitio, la
Asociación de Vecinos “Unidad” del Polígono San Pablo; el escenario, una
humilde tarima, un pupitre y unas sillas de colegio en las que se celebraban
las famosas asambleas de vecinos de aquel tiempo un tanto revuelto. Y flamenco,
claro.
El dominio del compás
Paco Menudo no es un guitarrista académico, pero tiene un
sentido del compás que para sí quisieran muchos guitarristas, y yo. Puede
mantener una conversación mientras toca, nada le entretiene el reloj. Es la
teoría de Rafael Mendiola puesta en práctica. <<Niño, dile a quien
presume de compás que te haga uno por soleá; háblale mientras lo hace, y
comprueba si lo pierde o no.>> El reloj interno es algo con lo que se
nace. A mi precisamente no me lo dejó mi bato como herencia.
Vuelta a la foto
Me ha parecido un buen pie de foto para este documento: lo
que el tiempo da, lo que el tiempo quita, lo que el tiempo pone, puede ser un resumen
del primer vistazo con que se contempla. Nos dieron ese tiempo para gozarlo, el
tiempo nos quitó esas cosas tan maravillosas que vivimos y nos puso luego otras
más accesorias e intrascendentes y sin las que sin embargo, hoy, no sabríamos
vivir. En fin, un jirón de nuestras vidas que, por casualidad, hoy he
encontrado. El único espectador que aparece en la foto es un viejo anarquista
que frecuentaba la Asociación y al que apodábamos “Durruti”.
José
Luis Tirado Fernández
Buena reflexión esta sobre el tiempo. Cualquier vieja fotografía puede disparar nuestros pensamientos y nos invada la nostalgia o quizás la alegría de haberla superado.
ResponderEliminarRecibe un cariñoso abrazo.
Contemplando la foto que incorporas en esta página, con la perspectiva de los calendarios pasados, no puedo por menos de recordar las noches que en 'El Semáforo' pasé tan a gusto escuchando vuestras sevillanas. Solo os conocía -a Paco y a tí, José Luis- de oiros. Afortunadamente hoy, tras las muchas experiencias personales vividas os contemplo, a ambos, en las corta nómina de buenos amigos.
ResponderEliminarHa sido para mí muy positivo el paso del tiempo.