Para Joaquin Arbide,
el mayor admirador
de estas frases
que se cogen al vuelo
detrás de la barra.
Historias de grises. Esta es una
más. Habíamos estado tantas, tantas veces delante de ellos, justo antes de las
carreritas, que en una de esas ocasiones, me dice mi amigo, justo en el momento
de iniciar la liturgia: ¿Te has dado cuenta lo brillante que traen hoy las
porras?
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…estábamos en mitad de la tormenta, el capitán nos llamó a su camarote y nos enseñó un carta de
navegación. Muchachos -nos dijo-, si este punto es una isla, estamos salvados,
pero como sea la cagá de una mosca, nos vamos al carajo.
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Uno
sentado leyendo el periódico y viene
otro y le dice: Amigo, parece que está usted aburrido. Éste levanta la cabeza y
le contesta: Más vale estar aburrio que no cansao…
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EL
PLANO DE UN CAFÉ
Una señora pide un café: “Póngame
un descafeinado de máquina, en taza mediana, cortito pero que no sea un
manchado, sino un poco más oscuro, que no tenga mucha espuma, con leche
desnatada de la marca tal si es posible, mitad y mitad, no me de sacarina de
bote, sino de sobre, calentito, pero que no queme, ah¡ y no me lo ponga hasta que
no esté hecha la tostada…
Sólo
le faltaron los planos, las cotas, las medidas y los marmolillos, balizados y
milimetrados.
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…éste se lava poco, me parece a mí. –Si, tiene aspecto de
asearse de cuando en cuando. El día que se decida se va a tener que meter en
agua hasta que pierda la cáscara, como las almendras…
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… cuando no existía Conlima se
llamaba al varillero, por lo general era gente humilde que traía su propio
equipo de desatascar. Unos largueros flexibles que se podían enroscar unos con
otros y alargar de esa manera el alcance para el desatasco, una pala pequeña,
una soleta, una palanca, etc.… El último
que vino a mi casa, después de hacer el trabajo y cobrar, me dejó, para que lo
llamara en otra ocasión, una tarjeta de
presentación, léela atentamente: Fulano de Tal y Tal, calle, Nº, etc. Ingeniero
Técnico en mojones.